Receta fácil de galletas de mantequilla de maní keto – bajas en carbohidratos y sin azúcar

Galletas crujientes y deliciosas de mantequilla de maní sin azúcar

Un placer sin culpa para los amantes de lo dulce

Si sigues una dieta baja en carbohidratos o simplemente quieres reducir el consumo de azúcar, seguramente has buscado opciones de postres saludables sin renunciar al sabor y la textura de los dulces tradicionales. Estas galletas de mantequilla de maní keto son la solución perfecta: combinan una textura ligeramente crujiente por fuera y suave por dentro, un intenso sabor a maní tostado, y lo mejor de todo, sin harinas refinadas ni endulzantes procesados.

Con solo unos pocos ingredientes básicos y una preparación rápida y sencilla, estas galletas son ideales para cualquier momento del día. Puedes disfrutarlas en el desayuno, como merienda o incluso después de una comida. Son una opción ideal para acompañar una taza de café o té, ya que su sabor profundo y cremoso se complementa perfectamente con bebidas calientes.

¿Qué hace especiales a estas galletas keto?

Un postre sin azúcar pero con todo el sabor

Las galletas tradicionales suelen estar cargadas de azúcar y harinas refinadas, lo que puede provocar picos de azúcar en la sangre y antojos constantes. Esta versión keto evita estos ingredientes sin sacrificar el sabor, gracias a una combinación perfecta de harinas alternativas y endulzantes sin carbohidratos.

Los ingredientes clave que hacen posible esta receta son:

  • Mantequilla de maní natural – Aporta un sabor intenso y una textura cremosa sin necesidad de utilizar grasas añadidas.
  • Harina de almendras – Proporciona una base suave y con un ligero toque de frutos secos, sin agregar carbohidratos innecesarios.
  • Endulzante sin azúcar – Sustitutos como eritritol o monk fruit ofrecen dulzura sin alterar los niveles de glucosa en sangre.
  • Huevo – Actúa como aglutinante, manteniendo las galletas en la consistencia perfecta.
  • Extracto de vainilla – Acentúa el sabor y aporta un aroma irresistible.

Controla la textura según tu preferencia

Uno de los mayores beneficios de estas galletas es que puedes ajustar la textura dependiendo de tus gustos.

  • Si las prefieres más suaves, hornéalas durante menos tiempo y usa un poco más de mantequilla de maní.
  • Si las prefieres más crujientes, hornéalas unos minutos adicionales y déjalas enfriar completamente antes de comerlas.

Unas galletas perfectas para cualquier ocasión

Estas galletas keto no solo son fáciles de hacer, sino que también son una excelente opción para compartir. Puedes prepararlas para una reunión con amigos, como un detalle especial para regalar, o simplemente para tener un snack saludable en casa.

Además, puedes hacer una tanda grande y almacenarlas para disfrutarlas en diferentes momentos:

  • A temperatura ambiente se conservan bien hasta 5 días en un recipiente hermético.
  • En el refrigerador pueden durar hasta 2 semanas sin perder su textura.
  • Congeladas pueden almacenarse hasta 3 meses, simplemente deja que se descongelen a temperatura ambiente antes de consumirlas.

Personaliza la receta a tu gusto

Agrega un toque de chocolate o especias

Si bien estas galletas son deliciosas en su versión original, puedes hacerlas aún más irresistibles con algunas variaciones:

  • Chispas de chocolate sin azúcar – Añaden un toque extra de dulzura y combinan perfectamente con la mantequilla de maní.
  • Canela o nuez moscada – Aportan un aroma cálido y realzan los sabores de los frutos secos.
  • Sal marina gruesa – Un ligero toque de sal en la superficie hace que el sabor a maní sea aún más intenso.

Alternativas para quienes no consumen frutos secos

Si no puedes consumir maní o almendras, hay formas de adaptar la receta:

  • Usa mantequilla de semillas de girasol en lugar de mantequilla de maní para una opción sin frutos secos.
  • Sustituye la harina de almendras por harina de coco, reduciendo la cantidad, ya que absorbe más humedad.

Un postre saludable sin sacrificar el placer

Si buscas un dulce que sea sano, fácil de hacer y con ingredientes simples, estas galletas de mantequilla de maní keto son la elección perfecta. No solo son bajas en carbohidratos y sin azúcar, sino que también son increíblemente sabrosas y satisfactorias. Prepara una tanda y disfruta de un snack delicioso y sin culpa en cualquier momento del día.

Ingredientes de la receta
Mantequilla de maní (cremosa, sin azúcar) – 200 g (¾ cup)
Harina de almendras – 50 g (½ cup)
Endulzante granulado (eritritol, monk fruit, stevia blend) – 80 g (⅓ cup)
Huevo – 1 grande
Polvo de hornear – 5 g (1 tsp)
Extracto de vainilla – 5 ml (1 tsp)
Sal – 1 g (¼ tsp)
La cantidad producida por la receta.
Porciones: 12 galletas
Instrucciones de preparación
  1. Precalentar el horno a 180 °C (350 °F) y preparar una bandeja con papel para hornear.
  2. En un tazón grande, mezclar la mantequilla de maní, el endulzante, el huevo y el extracto de vainilla hasta obtener una mezcla homogénea.
  3. En otro tazón, combinar la harina de almendras, el polvo de hornear y la sal.
  4. Incorporar los ingredientes secos a la mezcla de mantequilla de maní y revolver hasta formar una masa uniforme.
  5. Formar pequeñas bolas de masa (aproximadamente 1 cucharada por galleta) y colocarlas en la bandeja, dejando espacio entre ellas.
  6. Aplastar cada galleta con un tenedor, formando un patrón de rejilla en la superficie.
  7. Hornear durante 10–12 minutos, hasta que los bordes estén ligeramente dorados.
  8. Dejar enfriar en la bandeja durante 5 minutos, luego transferir las galletas a una rejilla para que se enfríen completamente.
Preparación
5 minutos
Cocinar / Hornear
10 minutos
Tiempo total
15 minutos

Cómo mejorar la receta de galletas de mantequilla de maní keto

La importancia de elegir los ingredientes adecuados

Las galletas de mantequilla de maní keto son un postre delicioso y saludable, pero su éxito depende en gran medida de la calidad y combinación de los ingredientes. Cada elemento tiene un papel clave en la textura, el sabor y la consistencia final. Si se comprenden las funciones de cada uno, se pueden realizar ajustes y variaciones para obtener una galleta más suave, más crujiente o con un perfil de sabor más intenso.

Mantequilla de maní: el corazón de la receta

La mantequilla de maní es el ingrediente estrella de estas galletas, aportando un sabor rico y cremoso junto con una textura densa y satisfactoria. Sin embargo, es fundamental elegir una mantequilla de maní natural, sin azúcar añadida, para asegurarse de que el contenido de carbohidratos siga siendo bajo.

¿Cómo influye la mantequilla de maní en la textura?
  • Mantequilla de maní cremosa – Da una textura suave y homogénea, perfecta para quienes prefieren galletas más blandas.
  • Mantequilla de maní con trozos – Agrega un toque crujiente y más textura en cada bocado.
Alternativas a la mantequilla de maní

Si no puedes consumir maní o prefieres experimentar con otros sabores, hay varias opciones:

  • Mantequilla de almendras – Tiene un sabor más suave y levemente dulce, resultando en una textura más delicada.
  • Mantequilla de anacardo – Aporta una cremosidad extra y un sabor naturalmente dulce y mantecoso.
  • Mantequilla de semillas de girasol – Una excelente opción sin frutos secos, con un toque terroso y suave.

Ajustando el dulzor sin afectar la textura

Una de las claves en la repostería keto es sustituir el azúcar sin afectar el sabor y la textura de la preparación. No todos los endulzantes se comportan igual en el horno, por lo que es importante elegir bien.

¿Cuál es el mejor endulzante para estas galletas?

  • Eritritol – Aporta dulzura sin calorías, pero puede dejar un leve efecto refrescante en el paladar.
  • Monk fruit (fruta del monje) – Su sabor es más natural y no tiene posgusto amargo.
  • Allulosa – La mejor opción si se desean galletas más blandas, ya que retiene más humedad.
  • Stevia – Muy dulce en pequeñas cantidades, pero si se usa en exceso puede añadir un ligero sabor amargo.
Mezcla ideal de endulzantes

Para lograr un equilibrio perfecto entre dulzura y textura, lo mejor es mezclar eritritol con allulosa. Esto evitará que las galletas se endurezcan demasiado después de enfriarse.

Logrando la textura ideal: ¿crujiente o suave?

Dependiendo del tiempo de horneado y los ingredientes utilizados, las galletas pueden tener diferentes texturas.

Para galletas más suaves

  • Agregar más mantequilla de maní para aumentar la humedad.
  • Añadir una yema de huevo extra para que la masa quede más tierna.
  • Usar allulosa como endulzante principal, ya que evita que las galletas se endurezcan.
  • Reducir el tiempo de horneado, sacándolas cuando aún estén ligeramente blandas en el centro.

Para galletas más crujientes

  • Incrementar la cantidad de eritritol, ya que al enfriarse cristaliza y da una textura más crujiente.
  • Hornear por unos minutos adicionales hasta que los bordes estén bien dorados.
  • Dejar enfriar completamente sobre una rejilla para que pierdan la humedad interna y se endurezcan más.

Variaciones para personalizar la receta

Estas galletas pueden mejorarse fácilmente añadiendo ingredientes extra que intensifiquen su sabor.

Galletas de mantequilla de maní con chocolate

  • Chispas de chocolate sin azúcar agregadas a la masa crean un contraste delicioso.
  • Cacao en polvo (1–2 cucharadas) le da un toque más amargo y sofisticado.

Especias y aromas para potenciar el sabor

  • Canela – Añade una calidez especiada que complementa el maní.
  • Nuez moscada – Intensifica el sabor y aporta profundidad a la receta.
  • Extracto de almendra o de coco – Realza el dulzor y da un toque más gourmet.

Para un toque salado

  • Escamas de sal marina espolvoreadas sobre las galletas antes de hornear hacen que el sabor del maní sea más pronunciado.

Cómo almacenar correctamente las galletas

Para conservar su frescura y textura, es importante guardarlas adecuadamente después de hornearlas.

  • A temperatura ambiente en un recipiente hermético duran hasta 5 días sin perder sabor.
  • En el refrigerador pueden almacenarse por hasta 2 semanas sin que se endurezcan demasiado.
  • En el congelador pueden guardarse por hasta 3 meses y descongelarse a temperatura ambiente cuando se deseen comer.

Ideas para disfrutar estas galletas de diferentes formas

Estas galletas pueden consumirse solas, pero también se pueden utilizar en otras preparaciones:

  • Base de tarta keto – Triturar las galletas y usarlas como base para un cheesecake sin azúcar.
  • Acompañamiento para helado keto – Desmenuzarlas sobre helado sin azúcar para un toque crujiente.
  • Sándwiches de galleta – Untar mantequilla de maní o chocolate derretido entre dos galletas para un postre más indulgente.

Las galletas de mantequilla de maní keto son una opción deliciosa y saludable que se puede adaptar fácilmente a distintos gustos y preferencias. Con pequeños ajustes en los ingredientes y el horneado, puedes personalizar su textura, dulzura y sabor, asegurando que sean el snack perfecto para cualquier momento del día.

Tamaño de la porción
Valores nutricionales (por galleta)
Calorias (kcal)
150
Carbohidrato (g)
4
Colesterol (mg)
10
Fibra (g)
2
Proteínas (g)
5
Sodio (mg)
90
Azúcar (g)
1
Grasa (g)
13
Grasa saturada (g)
3
Grasa insaturada (g)
9
Grasas trans (g)
0
Alérgenos
  • Contiene maní y huevo.
  • Esta receta es libre de gluten, pero no es apta para personas con alergias a los frutos secos debido al uso de harina de almendras.

Sustituciones para alergias y versión sin gluten:

  • Sustituir la harina de almendras por harina de coco (30 g / ¼ cup) para evitar frutos secos.
  • Reemplazar la mantequilla de maní por mantequilla de semillas de girasol para una opción sin maní.
  • Sustituir el huevo por “huevo de linaza” (1 cucharada de linaza molida + 3 cucharadas de agua) para una versión vegana.
Vitaminas y minerales
  • Vitamina E (1 mg por galleta) – Favorece la salud de la piel y el sistema inmunológico.
  • Magnesio (20 mg por galleta) – Esencial para la función muscular y nerviosa.
  • Potasio (100 mg por galleta) – Ayuda a regular la presión arterial y la hidratación.
  • Calcio (10 mg por galleta) – Contribuye a la salud ósea.
Contenido de antioxidantes
  • Polifenoles de la mantequilla de maní – Ayudan a reducir la inflamación y mejorar la salud del corazón.
  • Vitamina E de la harina de almendras – Protege las células del daño oxidativo.
  • Lignanos en la linaza (si se usa como sustituto del huevo) – Favorecen el equilibrio hormonal y la salud cardiovascular.

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