Los snacks salados son una opción popular para quienes prefieren sabores intensos y sabrosos en lugar de dulces. Estos aperitivos incluyen una variedad de ingredientes como queso, frutos secos, galletas saladas, y productos horneados o fritos que proporcionan un bocado crujiente y lleno de sabor. Entre los snacks salados más comunes se encuentran las palomitas de maíz, pretzels, chips, garbanzos tostados y palitos de queso.
Son perfectos para calmar el hambre entre comidas o como entrantes antes de un plato principal. Pueden hacerse más saludables eligiendo opciones como galletas integrales, chips horneados o snacks a base de frutos secos y semillas, que aportan fibra y grasas saludables. Además, los snacks salados pueden sazonarse con hierbas y especias para agregar más sabor sin necesidad de ingredientes procesados. Son una opción deliciosa y conveniente para disfrutar en cualquier momento del día.
Las patatas al horno con romero y ajo son una de esas guarniciones que combinan a la perfección simplicidad y sabores intensos. Esta receta...