Los guisos sustanciosos son platos robustos y llenos de sabor, ideales para los días fríos y para reconfortar el cuerpo. Estos guisos se cocinan a fuego lento, combinando trozos de carne como ternera, cordero o pollo, con verduras como patatas, zanahorias y cebollas. Se cocinan en caldos o salsas ricas, a menudo enriquecidas con hierbas, especias y a veces vino o cerveza, lo que intensifica los sabores. Ejemplos clásicos incluyen el guiso de ternera, el estofado de cordero y el guiso irlandés. Los guisos sustanciosos se caracterizan por su consistencia espesa, lograda a través de una cocción prolongada que ablanda la carne y permite que los sabores se mezclen. Suelen servirse con pan crujiente o sobre arroz, ofreciendo una comida completa que satisface tanto el cuerpo como el alma. Son el plato perfecto para disfrutar de una comida cálida y reconfortante en cualquier época del año, especialmente en los días más fríos.
