Los panqueques y waffles son dos clásicos del desayuno, conocidos por su textura suave y esponjosa. Ambos se elaboran con una masa básica de harina, huevos, leche y polvo de hornear, pero su diferencia radica en la preparación. Los panqueques se cocinan en una sartén, creando discos suaves y dorados, mientras que los waffles se preparan en una waflera, lo que les da una textura crujiente por fuera y esos característicos huecos perfectos para retener los ingredientes que se les añadan.
Ambos se disfrutan comúnmente con una variedad de ingredientes, como jarabe de arce, frutas frescas, crema batida o mantequilla, permitiendo múltiples opciones de personalización. También pueden hacerse versiones saladas, añadiendo tocino, queso o verduras. Los panqueques y waffles son fáciles de preparar y muy apreciados por personas de todas las edades, siendo una excelente opción para desayunos o brunchs especiales. Sin duda, son una deliciosa manera de empezar el día.